Hoy os quiero hablar de mi rutina facial diaria, esto es, los productos que día a día uso para el cuidado del rostro. Hace ya un tiempo dediqué una entrada a este mismo tema, pero dado que he cambiado todos los productos que uso de rutina, he pensado que estaría bien hacer una actualización.
Así que sin más rodeos. ¡Empecemos!
Crema regeneradora facial de propolis de Propol-mel
Es la crema facial que uso por las mañanas. De este producto ya os hablé en una ocasión, cuando os presenté los productos de esta marca que he probado (
aquí).
De olor herbal (mezcla de propóleo y lavanda), tiene una textura muy ligera, por lo que se absorbe enseguida. Hidrata un montón, y la considero apropiada sobre todo para las pieles más secas y estropeadas. Es mano de santo para aquellos casos en que nuestra piel se encuentra más deshidratada y necesitada de mimos. Un producto natural al 100% que merece muchísimo la pena, sin duda.
Crema facial Night Defense de Snowberry
Uno de los útlimos productos que he incluído en mi rutina facial y con el que no puedo estar más contenta. Quizás no conozcáis Snowberry, pero se trata de una marca de cosmética natural procedente de Nueva Zelanda. Este producto en concreto es una crema hidratante para la noche. Tiene un color marronáceo y una textura más bien densa, aunque se absorbe enseguida. Tiene un olor muy agradable, que a mí personalmente me gusta mucho. Está indicada sobre todo para pieles irritadas y con manchitas, ya que tiene propiedades antiinflamatorias, que ayudan a suavizar y calmar la piel. Aunque no es específica para el control de la grasa, yo tengo la piel mixta y me regula bastante bien la producción de sebo, así que me resulta perfecta.
Un marca desconocida, pero muy recomendable.
Serum Pranalixir Corriger de Pranarom
No era una gran fan de los serums hasta que probé este. El producto es básicamente un aceite base junto con aceites esenciales. Viene con un dosificador tipo gotero. De esta forma, y sólo con tres gotitas, ya tenemos la cantidad necesaria para aplicar por todo el rostro. Lo uso algunas noches en vez de mi hidratante habitual, a modo de "cura" o para dar un extra de nutrición a mi piel. No se absorbe al momento, así que el rosto queda un pelín "aceitoso" durante un tiempo. Por esta razón lo uso por las noches. De esta forma hace efecto durante el tiempo de sueño y cuando despierto, noto mi piel mucho más resplandeciente y suave. Y sin nada de grasa, importante. La verdad es que se nota un montón la diferencia, incluso con un solo uso. Además, al necesitar muy poquita cantidad para cada aplicación, cunde un montón. Un producto que para mí se ha convertido en un imprescindible.
Exfoliante de arcilla de Cattier
Cuantas ganas tenía de tener este exfoliante. Tras leer repetidas reviews positivas sobre él, necesitaba probarlo. Se trata de un producto de la marca francesa de cosmética natural Cattier. Elaborado a base de arcilla blanca y aloe vera, es un producto 100 % natural. También contiene otros ingredientes como lavanda, glicerina o menta, que es el que le da el olor tan rico que tiene. Su textura es similar a un dentífrico, con algunos granulitos muy finos, invisibles para el ojo, pero sí notables al tacto. Estas micropartículas son las que le dan su acción exfoliante. El producto se aplica en la piel del rostro, ligeramente humedecida, dando un masaje en forma de círculos y después se aclara con abundante agua tibia. El resultado es una piel limpia, lisa y sobre todo muy muy suave. Es una exfoliación efectiva, que no produce irritaciones ni rojeces, por lo que es un producto muy recomendado sobre todo para las pieles más sensibles.
Mascarilla Adaptarom de Pranarom
Cuando tengo tiempo (y ganas) me gusta mimar la piel aplicando una mascarilla. La que estoy usando hasta ahora es de marca francesa de cosmética natural: Pranarom. Su ingrediente base es la arcilla, aunque también tiene otros ingredientes como el palo de rosa, pino silvestre, abeto negro y mirto. El 98 % de los ingredientes son de origen natural y el 12 % proceden de agricultura ecológica. Sin perfumes, sin PEG, sin fenoxietanol, sin parabenos, y sin testar en animales. Lo ideal sería aplicarlo de 1 a 2 veces por semana. Tras limpiar la piel con nuestro desmaquillante habitual, lo dejamos durante aproximamadamente 15-20 minutos, para después retirarlo con agua tibia. El resultado es una piel más reluciente y suave.
Bálsamo labial de canela y clavo de Matarrania
Se trata de un bálsamo elaborado a base de aceite de oliva, aceite de almendras dulces, cera de abeja, aceite esencial de canela y aceite esencial de clavo. Es un producto elaborado únicamente a base de aceites, sin agua, por lo que no es necesario la adicción de conservantes. Es un producto natural al 100 %.
Tiene una textura semejante a la cera, de modo que se derrite con el calor de nuestros dedos y al contacto con la piel. Tiene un olor muy rico, como a canela, con un toque de aceite de oliva. Y es que no lleva perfumes sintéticos, huele a lo que lleva.
Lo uso sobre todo por las noches. Me lo aplico antes de dormir y por la mañana cuando me despierto mis labios son otros. ¡Es una pasada! Es sorprendente cómo repara los labios: los deja mucho más suaves e hidratados. En caso de irritación, calma la inflamación y ayuda a la regeneración de la piel.
Un producto para repetir, sin duda. Si queréis más información, hice una review más extensa de este bálsamo
aquí
Y vosotras, ¿conocéis alguno de estos productos? ¿Qué productos soléis usar en vuestra rutina facial diaria?